Con el envejecimiento la piel presenta una menor regeneración de las células cutáneas y una disminución del tejido celular subcutáneo. Las fibras colágenas de la piel pierden elasticidad con la edad y disminuyen en cantidad, teniendo como consecuencia una piel seca, arrugada y sin elasticidad.

Este problema, en el caso facial lleva a la aparición de arrugas, principalmente a las llamadas arrugas causadas por la risa, las patas de gallo, arrugas en la frente y las arrugas alrededor de los labios.

En medicina estética, la inyección del ácido hialurónico estabilizado, es la solución natural, rápida y sin cirujía ni dolor a este problema, ya que rellena los espacios dejados por las pérdidas naturales del mismo y de colágeno y elimina en gram medida las arrugas faciales.

El implante de ácido hialurónico vía inyección subcutanea empleado por los especialistas médicos de la Clínica Castellana 100, es un gel totalmente biocompatible y biodegradable que actúa contra las arrugas, y su principal función en medicina estética es crear volumen en aquellas zonas en que se haya producido una merma del ácido hialurónico inherente al organismo (en la cara lleva a la aparición de arrugas facial).

Al tratarse de un producto natural, con el paso del tiempo (aproximadamente un año) el implante subcutaneo de ácido hialurónico es absorbido por el organismo sin ningún tipo de efecto secundario, transformándose en agua y dióxido de carbono. Sin embargo los últimos estudios e investigaciones médicas prueban que su efecto es acumulativo y que por tanto sus beneficios hidratantes y recuperadores de la elasticidad de la piel se multiplican con el tiempo y las subsiguientes sesiones.

El Botox, una forma diluida de la toxina botulínica tipo A, se considera hoy en día que es uno de los tratamientos que ofrece mejores resultados para eliminar las arrugas o tratamiento de la ritidosis. Esta forma de toxina botulínica, tras su infiltración con una aguja extra fina en el músculo debajo de la piel de la zona que se desea tratar, actúa inhibiendo por relajación el movimiento muscular. Con este efecto se pretende que desaparezcan las arrugas y por tanto proporcionar un aspecto más juvenil en la piel.
Tiene una duración temporal, entre 3 a 6 meses, lapso después del cual debe renovarse la dosis. Rara vez se han dado casos de efectos secundarios como reacciones alérgicas, rigidez facial o náuseas, que aún en el caso raro de que aparezcan, desaparecen al poco tiempo. Sin embargo, esta es la razón fundamental por la que el tratamiento sólo debe llevarse a cabo por un médico especialista.

Tanto uno como el otro, son tratamientos para distintos tipos de arrugas que el especialista debe valorar para elegir el más adecuado en cada caso. A veces los mejores resultados se obtienen con los dos, aplicando cada uno a las arrugas que lo demanden. En la Clínica Castellana 100 somos especialistas en estética dental y facial en su conjunto desde hace más de 20 años y nos caracteriza la naturalidad de nustros resultados.